Cuando los dos jugadores rivales cuentan con buena técnica y óptimas condiciones físicas, el factor desequilibrante suele ser el carácter. Salir a buscar el partido y dar, con coraje y aciertos, claras muestras de una auténtica ambición de triunfo.
En este video hay buena técnica y capacidad física. Pero el español Carlos Moyá sintió la presión de un Oliver Rochus "decidido y convencido" que le hizo temblar el pulso.
El jugador belga de tan solo 1 metro con 68 cm. torció el rumbo el partido sobre el final del quinto set, con un hermoso revés de una mano, muchas derechas punzantes sobre las líneas y buenas subidas a la red. Moyá no respondió al coraje con más coraje y su especulación le costó el parido, que ceró con una doble falta.
Hermosa batalla entre un EX N°1 y el jugador más bajo del circuito, que alguna vez tocó el puesto #24. Aquello fue en el U.S.Open 2004.
![Imagen](https://i.imgur.com/ycQe4oU.jpg)